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Representantes de la ITAIPU Binacional, de la SENAVITAT y empresas contratistas, responsables de la construcción de los monobloques y viviendas unifamiliares del barrio San Francisco, mantuvieron una reunión con representantes de la Cámara Paraguaya de la Industria Cerámica, a fin de garantizar la producción de materiales de construcción nacional, durante la realización de la obra.

La construcción del barrio San Francisco, en el predio del RC4, en Zeballos Cué, será un hito histórico en el rubro, por la edificación de 1.000 viviendas, así como también por el tiempo de entrega de la obra, cuya meta sigue siendo “Navidad en casa”.

A fin de garantizar todos los materiales de construcción, de producción nacional, que se utilizarán durante la obra, se realizó una reunión con los ceramistas, en la sede de la ITAIPU Binacional. También asistieron los representantes de Consorcio Construcciones Industrializadas, encargada de la construcción de los 78 monobloques (888 departamentos) y NAD constructora, responsable de las 112 viviendas unifamiliares.

El director de coordinación ejecutivo de la IB, Pedro Domaniczky, destacó que se dará prioridad a la industria nacional, tal como había solicitado el gremio de ceramistas y oleros.

“Necesitamos que los productos sean de primera calidad, a fin de garantizar la durabilidad de las construcciones de las casas y monobloques. Pedimos que la prioridad sea la calidad”, manifestó Domaniczky.

Adelantó que, si los materiales no pasan el control de calidad, serán rechazados, independientemente al volumen de los lotes.

Por su parte, el superintendente de obras y desarrollo de la ITAIPU, Carlos Santacruz, recordó que hubo un compromiso de la Entidad y de la SENAVITAT con la industria nacional de cerámica y para ello se modificaron los pliegos de las licitaciones, en cuanto a viviendas unifamiliares (de construcción tradicional: ladrillo, tejas, tejuelos, etc.) y la adquisición de pisos, colocando la figura de cerámica esmaltada.

Resaltó la necesidad de trasparentar todo el proceso de adquisición de los materiales de construcción nacional, a precios de mercado. “En cuanto a pisos, usaremos más de 74 mil m2 (para los monobloques), una cantidad considerable y necesitaremos que la provisión se haga de manera continua, para evitar atrasos y penalidades”, agregó.

Anunció que la ITAIPU realizará el control de calidad de los materiales por muestreos, en caso que no pase el ensayo, los lotes no serán aceptados. “A nosotros nos queda la misión de verificar, controlar, si sirve o no. A las constructoras les cabe la responsabilidad de negociar con los proveedores de cerámica, que los materiales se ajusten a la calidad requerida”, acotó.

Igualmente, destacó que las empresas contratistas deberán asegurarse de que los materiales sean nacionales, con certificados de origen y evitar que sean de contrabando.

Ceramistas

El presidente de la Cámara Paraguaya de la Industria Cerámica, el licenciado Ricardo Maluf, manifestó que los tiempos son cortos, pero harán el esfuerzo de cumplir con los pedidos, en cuanto a calidad y cantidad, de los pisos a ser utilizados en las construcciones. “La calidad de la layota nacional mejoró sustancialmente, algunos ya con calidad de exportación”, afirmó.

En tanto, las empresas contratistas plantearon la necesidad de formar un consorcio de proveedores de materiales de construcción, a fin de garantizar la calidad, durabilidad y provisión, de tal forma, a que la responsabilidad sea compartida.