Después de casi 20 años, la ITAIPU Binacional actualizó su Plan Director de Gestión Ambiental que define nuevas directrices ambientales, áreas y ámbitos de acciones para proteger y defender las áreas protegidas y el embalse, además de trabajar en la interacción con las comunidades del área de influencia de la central hidroeléctrica.  Esta medida se suma a la serie de acciones que viene encarando la Entidad para proteger los recursos naturales que rodean al área del embalse.

El Consejo de Administración de la ITAIPU aprobó este viernes, a pedido del Directorio Ejecutivo, este documento rector de acciones socioambientales, así como la Norma de Gestión de los usos múltiples de las áreas protegidas de la Binacional y la Norma de Zonificación Biótica de las áreas protegidas y del embalse de ITAIPU. La primera sustituye al Manual de Procedimientos de Gestión Ambiental (PDGA) y reglamenta el uso y ocupación de las áreas Protegidas de ITAIPU, considerando las modificaciones de la legislación, así como las demandas socioambientales en ambas márgenes.

Estas son normativas que identifican áreas o zonas y su utilización, de acuerdo a sus características biofísicas y define el objetivo de protección del embalse para mantener la calidad del agua.  También se enfocan principalmente a la gestión ambiental de la ITAIPU, así como a sus conexiones con los demás ejes tales como: desarrollo social, económico, cultural y tecnológico con miras a lograr los objetivos estratégicos de la institución, contribuyendo con la seguridad hídrica y el desarrollo territorial sostenible.

El PDGA anterior fue aprobado en el 2000, pero teniendo en cuenta las necesidades actuales de encarar acciones que puedan ayudar a proteger estas zonas, las autoridades de la Binacional consideraron oportuno contar con nuevas normativa medioambientales.

Es preciso señalar que la actualización de las normativas se da en un momento en que la ITAIPU viene denunciando hechos punibles como invasión de inmueble, tala indiscriminada de árboles, pesca ilegal y caza furtiva en sus distintas áreas protegidas, principalmente en la zona de Puerto Indio, Alto Paraná, donde la situación se ha vuelto crítica.

Estos hechos atentan contra el patrimonio natural de toda la zona de influencia de la represa, ya que las áreas silvestres protegidas permiten mantener en estado natural el agua, además de constituir un corredor antierosivo que protege el curso del río Paraná y a los bosques del Bosque Atlántico del Alto Paraná (BAAPA), uno de los 25 ecosistemas más importantes de la biodiversidad.  Recientemente, guardias forestales hallaron restos de un animal silvestre presuntamente víctima de trampas tipo iraquí, en la Reserva Itabo. Los artefactos habrían sido colocados por los invasores que constantemente ingresan a la propiedad de ITAIPU y que ya están siendo investigados por el Ministerio Público.

Asimismo, ante las constantes amenazas que reciben los guardaparques de ITAIPU, el director general paraguayo, Ernst Bergen, y los demás directores expresaron su apoyo a los trabajadores, y acordaron fortalecer la logística destinada a la vigilancia de las áreas protegidas.