Se reanudaron los trabajos de construcción del segundo piso del bloque B, del Colegio “Tacuru Pucu”, de Hernandarias.

Como parte de su interacción con la comunidad circundante, Itaipu Binacional, a través de la Fundación del Parque Tecnológico de Itaipu (FPTI) y la Dirección de Coordinación Ejecutiva, reanuda los trabajos de cooperación con instituciones de enseñanza de la región.

La comunidad educativa en general vive con expectativa esta experiencia y aguarda la culminación de las obras que se traducirán en comodidad para educadores y educandos, y a su vez, facilitará el proceso enseñanza-aprendizaje.

Uno de los centros educativos que se beneficia con esta acción es el Colegio Nacional “Tacuru Pucu”, de Hernandarias, uno de los centros educativos públicos de cabecera de la región. En esta institución, que cuenta con más de 1.250 alumnos en el nivel medio, desde el pasado lunes se reanudaron los trabajos de construcción de la segunda planta del pabellón B, la construcción del tinglado, techado del patio de honor, la culminación de las aulas y laboratorios. El tiempo estimado para la conclusión de esta etapa es de seis meses, según el compromiso asumido por los contratistas.

Para la segunda etapa se prevé la demolición del bloque C, que dará paso a la construcción de un nuevo y moderno pabellón de dos plantas. En ese piso, se erigirá un anfiteatro, que será utilizado por los alumnos para la realización de eventos culturales.

Lic. Aniceto López, director Tacuru Pucu.

“Nos esperan grandes cosas. Los trabajos pararon 6 a 7 meses por problemas registrados con los contratistas. La prosecución se hizo esperar un poco y estamos pasando muchas incomodidades por ahora, pero vale la pena la espera, pues nunca es tarde cuando la dicha es buena”, comienza diciendo el licenciado Aniceto López, director general de la institución.

El responsable de la institución explicó que en el colegio funcionan seis bachilleratos técnicos, de los cuales, el equipamiento tanto de infraestructura como de laboratorio de cinco de ellos, está prácticamente a cargo de la Itaipu Binacional a través del PTI.

“Tengo que agradecerle siempre a los directivos del PTI, siempre muy atento el director, el ingeniero Calixto Saguier, la coordinadora, la señora Alicia y los arquitectos. Mi gratitud a la gente de Itaipu, que siempre estuvo junto a nosotros, al ingeniero Pedro Domaniczky; ellos siempre nos acompañaron, nos asisten, nunca nos desampararon”, manifestó.

López resaltó además la buena predisposición y la voluntad demostrada por los directivos de la entidad. “Uno debe ser agradecido en la vida, por lo tanto debo reconocer que el anterior director, Franklin Boccia entendió y atendió la necesidad de asistirnos y el actual director general, el doctor James Spalding, en las reuniones que tuvimos, también se mostró muy interesado en hacerlo. Nos dijo que quería que le presentemos proyectos, que le pidamos obras y no pedirle para que pague por discotecas ni ómnibus. Así lo estamos haciendo”, concluyó.