Este lunes se realizó el lanzamiento oficial de la evaluación del Estado de Preparación de las Energías Renovables en Paraguay (RRA, por sus siglas en inglés). La actividad, que cuenta con el apoyo de ITAIPU Binacional, es impulsada por el Viceministerio de Minas y Energía (VMME) juntamente con la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA). Participaron en el acto la Dra. María Antonia Gwynn, consejera de ITAIPU; Pedro Domaniczky, asesor de Energías Renovables de la Binacional; Félix Sosa, presidente de la ANDE; Arnoldo Wiens, ministro de Obras Públicas y Comunicaciones; Carlos Zaldívar, viceministro de Minas y Energía; entre otras autoridades.

Previo a este informe, que marca el inicio formal de la cooperación técnica entre el VMME e IRENA, se habían realizado varios talleres de validación, en los que fueron expuestos la situación actual del país, sus necesidades, oportunidades y obstáculos. Estos encuentros, de los que tomaron parte los representantes de ITAIPU, permitieron identificar las acciones claves para acelerar el desarrollo y despliegue de las energías renovables en el país.

Entre las conclusiones principales se destacan la necesidad de agilizar la diversificación de la matriz energética, apuntando a más fuentes de generación renovables no convencionales; el fortalecimiento de la eficiencia energética para la mejora en la calidad del suministro; y la mayor interrelación entre las instituciones energéticas para una óptima gobernanza, mejora del marco regulatorio, planificación a largo plazo y el desarrollo de políticas.

Francesco La Camera, director general de IRENA, aseveró que esta presentación se convierte en el primer hito de la cooperación con Paraguay para incrementar la penetración de las energías renovables. Las acciones claves detalladas en el reporte, a corto y mediano plazo, podrán crear condiciones más favorables para el despliegue de estas fuentes, acotó.

Félix Sosa, titular de la ANDE e integrante del Consejo de Administración de ITAIPU, aseguró que el RRA es de suma importancia para el sector eléctrico paraguayo, dado que permitirá sentar las bases para proyectar una generación alternativa a largo plazo, algo clave si se tiene en cuenta que Paraguay es el único país del mundo que tiene un 100% de generación eléctrica renovable.

“El gran desafío que tenemos es que el país siga teniendo una base totalmente renovable, por eso es muy importante el resultado de este trabajo. Mas todavía porque la ANDE tiene una planificación a 20 años, por primera vez en la historia, y ya contempla la generación renovable no convencional”, expresó.

Fomento de las energías renovables

Añadió que se necesita contar con las leyes adecuadas para impulsar al sector, como es el caso de la Ley para el Fomento de las Energías Renovables en el Paraguay. Esta necesidad se acentúa con las crisis hidrológicas que últimamente están afectando al territorio nacional, por lo que se requiere acelerar los diferentes proyectos de fuentes limpias y renovables, precisó.

Finalmente, Sosa destacó que la ANDE tiene la obligación de llevar la energía de calidad a los hogares paraguayos y en ese contexto viene ejecutando intensamente las obras de transmisión necesarias. Este es el caso de la línea de 500 kilovoltios (kV), doble terna, entre la subestación Yguazú e ITAIPU, lo que le permitirá a la empresa pública, por primera vez, retirar el 100% de la potencia de la Binacional.

Por su parte, Felipe Mitjans, director de Recursos Energéticos Primarios del VMME, remarcó que esta cooperación técnica es fundamental para tener un panorama más integral e implementar acciones que garanticen la seguridad energética. Refirió que ahora se hará la socialización de los resultados y estos insumos también servirán para trabajar con las distintas comisiones del Congreso Nacional en el anteproyecto de actualización de la Ley 3.009 “De la Producción y Transporte Independiente de Energía Eléctrica (PTIEE)”, remitida en el 2019.

ITAIPU, a través de su Asesoría de Energías Renovables, encara diversos proyectos de investigación y desarrollo (I+D) sobre fuentes renovables no convencionales en diferentes frentes, a fin de fomentar la innovación energética, la sostenibilidad de los emprendimientos y el acceso de más personas a energía limpia. Todas las iniciativas se enmarcan en las prácticas EREE (Energías Renovables y Eficiencia Energética), las cuales promueven el desarrollo sostenible.