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Medio Ambiente
Más de 60.000 plantines de especies medicinales produjo el huerto de ITAIPU el año pasado
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17/02/2021

La ITAIPU Binacional, a través de la División de Acción Ambiental, cerró el 2020 con la producción de 63.300 plantines de especies medicinales. Esta cifra representa casi 2.000 más que la registrada en el 2019. En el huerto medicinal, ubicado en el Centro Ambiental de la Entidad, se producen aproximadamente 60 especies medicinales identificadas.

Carmen Coronel, encargada del Proyecto Plantas Medicinales de la Entidad, explicó que el incremento de la producción se debe a la mayor demanda, ya que la gente empezó a hacer huertas familiares o comunitarias debido a la pandemia del COVID-19, tomando esta actividad como fuente de ingreso.

“Tuvimos alta demanda de plantines, principalmente de pequeños productores que decidieron  potenciar esta actividad, como también otros que querían iniciarse en el cultivo de plantas medicinales. Esto hizo que la cifra de producción aumente, a pesar de que hemos trabajado en equipos reducidos a consecuencia de la pandemia, para evitar aglomeración”, manifestó.

Entre las especies más solicitadas, Coronel comentó que se encuentran las aromáticas, como la albahaca clavo, orégano, y ruda; así como aquellas que tienen propiedades contra los resfríos, como el amba'y y el jaguarundi. “En el huerto producimos también especias que son condimentares y que tienen propiedades medicinales. El pedido es bastante surtido, pero predominan las hierbas utilizadas para tratar algún cuadro respiratorio”, acotó.

Por otra parte, la responsable del Proyecto Plantas Medicinales de la Entidad dijo que las personas que deseen dedicarse al cultivo de estas especies deben contar con un huerto cercado, para evitar el ingreso de animales. Recomendó no utilizar productos químicos para acelerar el proceso o para proteger a los plantines de algunas plagas, ya que serán destinados al consumo. Aclaró además que no se aconseja el uso del estiércol de animales para abonar o fertilizar, porque este puede contaminar con algún microorganismo al cultivo.

“Lo más recomendable es preparar un compost de las hojas que se tienen en la casa, por ejemplo. Formar nuestro propio abono que sea totalmente orgánico e ir enriqueciendo con eso nuestros cultivos. Además, es importante el desmalezamiento manual; es decir, ir sacando los yuyos que están demás”, añadió.