Un grupo de universitarios del cuarto año de Economía Agropecuaria Forestal de la Universidad Católica de Asunción, participó de una jornada de intercambio de conocimientos y experiencias sobre agricultura orgánica, este fin de semana pasado, en el Centro de Recepción de Visitas de la Itaipu Binacional.

Fueron expositores durante el encuentro, técnicos paraguayos y brasileños que están trabajando en el área, de las direcciones de Coordinación Ejecutiva de ambas márgenes y un representante de Costa Rica. En representación de los productores de agricultura orgánica de Paraguay, Juan Martínez, expuso sobre la rica experiencia de los pequeños productores compatriotas.

Los expositores destacaron que el mercado para la agroecología se está agrandando y que es posible el modelo en Paraguay. Los procesos de producción se están mejorando, siendo una novedad el desarrollo rural sustentable.

En la ocasión, el director paraguayo de Coordinación Ejecutiva, Pedro Benjamin Mancuello, insistió en que la universidad debe integrarse a los productores, para la aplicación de metodologías adecuadas en la producción orgánica, al tiempo de resaltar la gran oportunidad para Paraguay en este rubro.

Mencionó en este contexto que productos paraguayos orgánicos llegaron hasta espacios de comercio justo en Nueva Zelanda y Nueva York. También indicó la gran importancia para los pequeños productores la reducción de intermediarios, de manera que los trabajadores del campo reciban más recursos por lo que producen.

Mancuello indicó que el encuentro sirvió para que la presentación de la experiencia de Costa Rica, a cargo de Jonathan Castro, ya que en este país, después de siete años de investigación, están planteando el modelo y una metodología que les permite cuantificar las ventajas de una pequeña finca familiar campesina o de agricultura orgánica.

“Es la experiencia de cuánto ellos contribuyen a dejar de emitir al ambiente carbono y cuánto contribuyen a la biodiversidad, ellos consiguieron hacer una valoración económica en toneladas de carbono año y también están tratando de certificar de que un tercero, a través de una auditoria externa, valide eso, para medir cuánto contribuyen a evitar un mayor calentamiento global”, señaló.

Mencionó que el evento responde a un proceso de intercambio, una discusión académica-científica y práctica, por un lado, con los estudiantes de cuarto curso de Economía Agropecuaria Forestal, y por otro lado, con los representantes de productores de agricultura orgánica de Paraguay y técnicos de las Direcciones de Coordinación de Itaipu, de Paraguay y Brasil.

“Nuestro ideal es que podamos ayudar a los pequeños productores, para que puedan recibir algún beneficio de trabajar en forma orgánica”, dijo Mancuello.

Indicó además, que Itaipu Paraguay, a través de la Dirección de Coordinación paraguaya y de la representación en la Comisión Nacional de Cambio Climático, pretende llevar esta posición país a la Cumbre Mundial de Cambio Climático a ser realizado en México a finales de noviembre.

“Queremos ver con gente que no se pone a trabajar ahora para recibir un beneficio, sino que ya estuvo trabajando hace un buen tiempo, a través de un proceso que se inició con el Centro Cooperativo Sueco y queremos aprovechar para identificar a los productores que tienen buenas prácticas y que ya están en el área de influencia de Itaipu, en una primera etapa y luego a nivel nacional”, expresó Pedro Mancuello.

Nelton Miguel Friedrich, director brasileño de Coordinación Ejecutiva de Itaipu, al resaltar los avances en la producción orgánica, con el apoyo de la Entidad a través de su programa “Cultivando Agua Buena”, indicó que el papel de los técnicos es la sensibilización. También destacó la importancia de la formación de cooperativas, planificación en fincas, con énfasis en requisitos de preservación ambiental. La mejor estrategia en este campo es trabajar con el agricultor como agente de difusión de experiencias y conocimientos, conforme señaló Friedrich.