El autotransformador TX RX está en proceso de evaluación de confiabilidad que durará 30 días, a partir de su energización, la cual servirá para entrar a operar con garantías a la etapa comercial e industrial.

La etapa de confiabilidad consiste en el levantamiento de datos para detectar posibles fallas en el funcionamiento del equipo, con el fin de que el transformador entre con todas las garantías a la etapa comercial o industrial.

“Aquí nosotros tenemos que observar todas las anormalidades que se presenten en el funcionamiento de los equipos instalados que entraron en operación, eso incluye equipos de maniobra, como también los transformadores, equipo de control, de protección y todo lo que haga al funcionamiento de los transformadores”, explicó Juan Peralta Martínez, técnico especializado de la División de Operación de la Central y Subestaciones (OPUO.DT)

Esta etapa de confiabilidad tiene un periodo de un mes a partir de la fecha en que fue puesta en funcionamiento la máquina y si en ese tiempo no se encuentra ninguna dificultad o anormalidad, se libera para la operación industrial, conforme a lo explicado por el profesional.

“En el caso de que haya alguna falla que sale del equipo, entonces eso se levanta y se eleva al fabricante para que se solucionen las fallas”, indicó.

Peralta dijo también que se emiten documentos que se llaman NRC (Relatorio de No Conformidad) y se le eleva al fabricante para que solucione. “En el caso de que salga del trafo, ahí se reúne el Comité Gestor con el grupo de acompañamiento y deciden qué hacer, generalmente comienzan de nuevo los 30 días de confiabilidad. Los 30 días son un periodo que garantiza el funcionamiento sin problemas del equipo”, recalcó.

En esta etapa trabajan los equipos de Mantenimiento, de Operación y del fabricante, es decir, de las 3 áreas que acompañan este proceso de 30 días, además del  gestor de contrato, del área financiera, de acuerdo a lo manifestado por Juan Peralta. 

Entretanto,  el equipo está energizado, integrado al sistema, alimentando ya el sistema eléctrico paraguayo, conjuntamente con los otros cuatro transformadores.

“Con esto se alivianó el problema de energía en nuestro país en esta época del año, a partir de esta subestación de Itaipu, podemos decir que todo está en orden, tenemos una disponibilidad bastante grande ya,  comparando con lo que teníamos anteriormente porque en el conjunto equivale  a un aumento del 25 por ciento a más de lo que se tenía anteriormente”, expresó al destacar que eso ayudaría a alivianar bastante el sistema eléctrico.

Resaltó que también se están realizando pequeños trabajos pendientes, más bien de las obras civiles, aquellos que no se pudo hacer en el tiempo de montaje , por el escaso tiempo que se tuvo.

“Un proyecto de esta envergadura normalmente llevaría de 12 a 15 meses y aquí se realizó en 8, desde las obras civiles, desde el aterramiento que se hizo hasta la entrada en operación”, manifestó el técnico.

La parte de montaje, comisionamiento (pruebas) y puesta en servicio, que generalmente lleva un tiempo de 8 meses, aquí se hizo en 5 meses, desde el primer montaje que se realizó de la primera estructura hasta la energización, según recordó. “Entonces el tiempo que tuvimos fue bastante corto para un trabajo muy complejo”, finalizó.