“Creo que la renegociación va a ser muy importante, no sólo para ambos países signatarios, sino también para la región y para la comunidad internacional”, afirmó el sábado último, María Antonia Gwynn, catedrática paraguaya seleccionada dentro del Fellowship para Líderes Globales de la Universidad Oxford de Inglaterra y la Universidad de Princeton, Estados Unidos.

Ella es abogada, Magister Juris y PhD en Ciencias Políticas y presentó ese día, ante funcionarios del Gobierno un resumen de su trabajo de investigación, aún en curso sobre el Tratado de ITAIPU, y algunos puntos de la renegociación del Anexo C, previsto para el 2023.

María Antonia Gwynn.

“Presenté el trabajo que estoy realizando en dos instituciones académicas internacionales como son la Universidad de Princeton en Estados Unidos, y la Universidad de Oxford, en el Reino Unido. Se trata de una investigación sobre la Renegociación del Tratado de ITAIPU”, sostuvo Gwynn.

Advirtió que para el análisis del caso se encuentra trabajando con un grupo muy importante de expertos en negociaciones asimétricas.

“Como paraguaya, contratada en estas instituciones académicas, creo que es muy importante, una chance única para nuestro país, de poner este tema en la mesa, hablar y discutir. Creo que puede salir un gran trabajo que puede enriquecer aquí”, indicó la catedrática paraguaya que actualmente se encuentra en la Blavatnik School of Government de la prestigiosa Universidad de Oxford.

La investigación está divida en dos partes: en la primera parte se desarrolla el panorama general, y se realiza una narración histórica de todos los eventos; luego se ve la implementación del Tratado y qué puntos podrían considerarse para la renegociación; por último se consideran proyecciones a futuro para tener en cuenta.

En la segunda parte de la investigación, que es la parte teórica se realiza un análisis de todas las teorías de negociaciones asimétricas y se ve qué herramientas o corrientes se pueden utilizar para este caso.

Precio: Royalties y compensación

Durante su presentación, la catedrática señaló que el precio de los royalties y compensación por la cesión de energía para el Paraguay, fueron fijados en el año 1973.

“Esto se fijó con una fórmula que se usó del departamento de Energía de los Estados Unidos que se usaba en los años ´70 como regla de aproximación. Pero luego ese mismo departamento mejoró esa fórmula pero en el caso del Tratado de ITAPU se fijó en 1973 y quedó ahí”, señaló.

Por otro lado, afirmó que el costo de producción, cuando el elemento es agua, se considera una renta económica, y que para determinar esa renta existen parámetros, incluso en el Derecho Internacional, que te dicen cómo hay que determinar ese precio.

“El problema del Tratado es que estos montos están fijos. Hay estudios actuales y comparativos a nivel mundial, que utilizan factores mucho más adecuados para una determinación de royalties y compensación en caso similares”, señaló la doctora Gwynn.

Sostuvo que en un hipotético escenario que se adecuen estos montos, no solo Paraguay tendrá más ingresos, también podrá tener mayor presupuesto y por ende tiene mayor chance de mejorar la infraestructura en todo el país.

La exposición también enfocó la importancia de establecer en un Tratado, la posibilidad de dirimir conflictos entre estados partes por medio de un organismo parcial y neutro como el arbitraje internacional.

Finalmente, la catedrática recomendó que se utilicen todas las herramientas disponibles para llevar adelante una buena renegociación del Tratado de ITAIPU.

La investigadora

La paraguaya Maria Antonia Gwynn, es Oxford-Princeton Global Leaders Fellow de la Escuela de Asuntos Públicos e Internacionales Woodrow Wilson y la Escuela de Gobierno Blavatnik, de la Universidad de Oxford.

Obtuvo su título de Abogada en la Universidad Nacional de Asunción, con honores; tiene diplomas de postgrado de Arbitraje Internacional y Fusiones y Adquisiciones por el Colegio de Derecho de Inglaterra y Gales y la Asociación Internacional de Abogados; también tiene un Magister Juris (Universidad de Oxford, Reino Unido) y un Doctorado (Bergische Universtitat Wuppertal, Alemania) además de otras especializaciones y entrenamientos por organismos internacionales.

En el 2016 aprobó el examen federal de Profesionalismo y Ética en la Profesión Jurídica del Colegio de Abogados de los Estados Unidos.