Algunos sindicatos de trabajadores de Itaipu han ido a la huelga desde el 3 de mayo último. Luego de numerosas negociaciones en días posteriores, el jueves 19 se llegó a un acuerdo base por el que los huelguistas levantarían la medida de fuerza y, por su parte, la empresa confirmaba lo inicialmente ofrecido en materia de beneficios económicos, laborales, médicos y sociales, y se disponía adicionalmente a encaminar diversos pedidos realizados por los sindicatos (en cuanto a seguro médico de los padres, paso de contratos por plazos a indeterminados para un conjunto de trabajadores, entre otros).

En virtud de ello se elaboró un Acta de Levantamiento de Huelga y Acuerdo de Compromisos que se tenía previsto suscribir entre las partes el viernes 20 de mayo.

Ello no ocurrió porque luego de lo consensuado inicialmente los sindicalistas comenzaron a solicitar otros puntos que no formaban parte del acuerdo ni estaban contemplados en las negociaciones.

En el documento consensuado inicialmente, entre otros beneficios, la empresa se comprometía a descontarles a los huelguistas solamente la mitad de los días no trabajados a razón de un día por mes, en lugar de hacerlo por la totalidad. Una concesión realizada como gesto de buena voluntad e interés de conciliación de parte de la patronal.

Pero luego del acuerdo inicial ahora piden que se les pague la totalidad de los días no trabajados y que se les abone también los días no trabajados a los empleados de terceras empresas que no laboraron a causa de la huelga. La remuneración de los tercerizados no es responsabilidad de Itaipu sino de sus patronos contratantes y el pago por la totalidad de los días holgados a los huelguistas no procede.

Esta es, en pocas palabras, la actual situación, que la Itaipu Binacional da a conocer para una buena información de los trabajadores involucrados, de los demás empleados de la empresa y de la ciudadanía en general.

Itaipu reivindica como únicos instrumentos válidos para dirimir diferendos el diálogo y la negociación y rechaza categóricamente todo tipo de violencia y enfrentamiento. En esa convicción siempre está abierta a la conciliación y respeta el derecho de todos sus trabajadores, tanto de los que están en huelga como de los que prefirieron continuar trabajando en cumplimiento de sus obligaciones contractuales aún en medio de intimidaciones, amenazas y ataques de parte de un sector que quiere impedirles el ejercicio de su libertad.